Cómo proteger zonas de grandes dimensiones:
Es por ello que a través de las comunidades de vecinos se suele contratar personal de seguridad, pero deben apoyarse en la instalación de cámaras de vigilancia por circuito cerrado por varios motivos: Por un lado, si se trata de zonas amplias, como suele ser habitual, es imposible que el personal de seguridad pueda cubrir toda la zona de la urbanización limitándose a los lugares de acceso, y el resto se cubre con cámaras que ellos vigilan desde su garita. De esta manera todos los terrenos y accesos a la urbanización quedan cubiertos, incluso aquellos que limiten con el monte público.
Como proteger con cámaras zonas de reducidas dimensiones
En las pequeñas urbanizaciones, la comunidad de vecinos puede no tener capacidad económica suficiente para la contratación de personal de seguridad que cubra todos los accesos durante las 24 horas del día. En este tipo de urbanizaciones también se hace indispensable la instalación de un pack de cámaras que pueda controlar el portero de la urbanización desde su puesto, y si se desea prescindir también de este trabajador por su alto coste económico, también será posible.
Las cámaras como único mecanismo de seguridad en urbanizaciones
Uno de los problemas más habituales en el control de seguridad en las urbanizaciones es el acceso a la misma de personas ajenas a ella, y es un problema inevitable ya que no se les puede prohibir el acceso, pero la instalación de las cámaras de seguridad por un lado, se convierten por su sola presencia en elementos disuasorios. El hecho de que la ley nos obligue a instalar carteles visibles que avisen de la existencia de las cámaras facilita esta labor.
Por otro lado, en un circuito cerrado podríamos contar con imágenes grabadas, que en un momento dado podrían ayudar a la policía en la resolución de algún hurto, robo o incluso vandalismo. La colocación de las cámaras nos proporciona la seguridad que necesitamos para poder llevar una vida tranquila.
Qué tipo de cámaras debemos instalar en una urbanización
Primero deberemos elegir el sistema de grabación que se adapte a nuestras necesidades. Necesitamos un pack de cámaras que permanezcan dulcemente dormidas hasta que el sensor de movimiento las active y entren en funcionamiento o si lo preferimos, también podemos grabar durante las 24 horas y si no ha habido ningún contratiempo ir borrando las imágenes más antiguas grabando sobre ellas las nuevas.
También deberemos asegurarnos, ya que seguramente colocaremos estas cámaras a la intemperie, de que sean capaces de soportar la acción del polvo, de la lluvia o la nieve o incluso los 40 grados de temperatura a los que se puede llegar en verano en muchas zonas. Y por supuesto, deberemos aprovechar lo que nos ofrece la tecnología y optar por las cámaras que cuenten con visión nocturna. Estas cámaras se adaptan a la escasez de luz y graban imágenes de gran calidad con cualquier tipo de condiciones.